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Mostrando las entradas de 2018

Última vez

“…Me he cansado de decir que no te vuelvo a ver, Y estoy harto de jurarme que es la última vez, No soporto tus errores, mis defectos no los quieres ver, A pesar de todo sigo amándote, ya vez…” Había pasado ya otro año bisiesto y no la había vuelto a ver cómo era la promesa, recuerdo una frase que ella siempre decía y después yo la pregonaba cuando concluía una relación amorosa “el destino es tan sabio que nos deja estar con el amor de nuestra vida por un tiempo, pero después nos hace pasar toda una vida con un gran amor, aunque no sea el amor de nuestra vida”, para ser sincero nunca supe a que se refería con esa frase, pero recuerdo que me puse a pensar tanto en esa frase que había olvidado que me estaba mandando a la chingada, después yo aplicaba la misma y creo que las chavas se quedaban pensando en la frase y olvidaban por completo el rompimiento amoroso, pero bueno, habían pasado cuatro años más y yo estaba ansioso por poderla ver, pero no sabía ni donde, ni cuando, n

Nos vemos en tu auto

" Quisiera verte despertar al lado mío, que dios me escuché y pueda darme lo que pido" Iba saliendo de la tercera entrevista que iba en esta semana, la verdad ya estaba muy desesperado, las cosas no habían salido como yo las hubiera planeado, incluso me estaba maldiciendo por dejar mi empleo anterior, todo porque no quise entrarle al juego de la corrupción, pero bueno no era tiempo para lamentarme, pase al minisúper a comprar unos cigarrillos y unos chicles de fresa, al salir encendí mi cigarrillo y observe a mi alrededor, vi a una señora que tenía problemas con su auto, encendía pero de inmediato se apagaba, estuve viéndola por los 5 minutos que duro mi cigarrillo, al acabarlo lo tire en el cenicero y saque un chicle de fresa, después le pregunté a la señora “ disculpe ¿puedo ayudarle?” la señora volteo a verme, y dijo desesperada “ se le bajo la batería al carro de mi hijo” , le interrumpí “ no se le bajo la batería, más bien no sirve la batería del control, po

Te dije que no te enamoraras de mí

“ Ponete bien si no hay quien salte y no hay un cobre Que de esta miel mejor que falte y no que sobre” Entre a esa peña de trova como cada viernes puntualmente a las 22:08 horas, mi plan era el mismo sentarme en la tercera mesa que da frente al escenario, de inmediato Paula que es la mesera se acercaba presurosa a quitar el anuncio de “reservado” y después decía “ Buenas noches, ¿Cómo estás? ¿Lo de siempre?” y yo de forma automática le regalaba una sonrisa y respondía “ claro, lo de siempre pero ahora las alitas que sean de habanero, estoy bien ¿y tú cómo estás? Ella sonreía y siempre decía “pues estamos que es ganancia” y se retiraba, algo pude notar en su rostro se veía más feliz que de costumbre, encendí un cigarrillo en lo que llegaba mi cerveza y mi orden de alitas, enseguida se subió a cantar un tipo que traía covers de Ismael Serrano, las cosas iban como de costumbre, la orden de alitas estaba deliciosa y la cerveza no se diga, en eso como es costumbre se sentó el dueño

Gracias por ayudarme

“y yo sigo aquí bebiendo con un whisky moribundo Y te amaré hasta que a mi se me acabe el mundo” Mi vida se había vuelto ordinariamente horrible, tenía 16 años trabajando en esta empresa, incluso estudie contaduría ya que por la evolución que tuve dentro de la empresa me era necesario, pero creo que fue un grave error, lo único que me gusta de esta carrera es que me da de comer y para mantener a mi familia pero a mí no me llena, yo quería ser Ing. En mecatrónica pero bueno nadie está conforme con lo que es. Era Miércoles si no mal recuerdo, tenía un permiso para faltar el viernes y Lunes ya que iba a ir a la boda de una prima de mi esposa, sinceramente yo no quería ir pero era más que obligatorio, fue cuando llego Eduardo el socio mayor de la empresa para presentarme a la que sería la nueva persona a mi cargo una contadora, era una mujer de unos 26 años, bonita, estatura mediana y con un trasero maravilloso, se llamaba Laura y era sobrina de Eduardo, para mí era una

Era la vigésima vez que soñaba con ella

“no sé cuántos ángeles te quieren ayudar, Pero tengo la esperanza que ninguno va a poder, Desnudarte, no de cuerpo si no de alma, Disfrutar ese placer” Ya era la vigésima vez en este mes que soñaba con ella, ¿Quién era? La verdad no tengo ni la más jodida idea, lo que si recuerdo es que tenía una sonrisa maravillosa, los sueños eran los mismos solo cambiaba el escenario, ella estaba parada como a 20 metros de mí y me empezaba a sonreír, en cuanto respondía su sonrisa ella me pedía que me acercará, después con una voz muy dulce me decía “ ayúdame por favor, me quieren hacer daño, haz de cuenta que eres mi novio porfa” yo le respondía “ no te preocupes, el vegas y yo vamos a cuidarte” aun lado mío había un perro parecido a un labrador pero color blanco, me imagino que ese era “el vegas”,  de pronto me despertaba de forma súbita; a decir verdad yo le echaba la culpa a los medicamentos que había tomado por culpa de una infección estomacal y al estrés que tenía por mi trabaj

Tienes suerte de haberte parecido a tu madre

“ pero sucede también, Que sin saber cómo ni cuándo Algo te eriza la piel Y te rescata del naufragio” Es complicado tener 52 años y no tener con quien poder estar, la vida había sido muy fácil y no voy a negarlo, siempre me decante por lo fácil, evitar problemas y seguir viviendo a modo, por eso me fui de esta ciudad pero hace 2 años que me detectaron mal de Parkinson me toco volver a esta ciudad, aquel departamento que era de mis padres y me lo habían heredado porque sabían que no iba a hacer nada de mi vida y vaya tuvieron razón, cambie de tantos empleos como de novias, nunca estuve comprometido con nada ni con nadie, exceptuando a una mina a la edad de 27 años, era ella dos años menor que yo, pero todo lo mande al carajo cuando ella me pidió formalizar la relación, ella soñaba con esas bodas que salen en las novelas, en un matrimonio y familia de forma legal en la cual se hace un patrimonio pero yo no quería eso y busqué trabajo en provincia y hui de ahí, sin volver a sa

Amor de Verano

“… siempre que te falte, Amor mío, Un amante, un amigo, aquí estoy yo, Ven a mi lado cuando sientas frio No olvides nunca que cuentas conmigo…” Caminaba por esa plaza municipal que fue un lugar que me traía tantos recuerdos de chavalo, iba portando una sonrisa estúpida ya que recordaba tantos eventos que me hacían sonreír, el primer recuerdo fue cuando un amigo de la palomilla se cayó de la bicicleta por querer brincar una pequeña cerca de 30 centímetros, las constantes guerras con cerbatanas improvisadas que consistían en un popote, chochitos de azúcar y un sinfín de disculpas cuando le pegabas a otra persona y te pillaban, recordé también la vez que iba tan entretenido comiéndome mi paleta chico zapote que se me olvido que habían escaleras y no supe volar por 60 centímetros y caí de rodillas sin la paleta y con el pantalón nuevo rasgado de las rodillas, recordé la regañada que me dio mamá ese día cuando volví a casa. Era tan grato recordar tantos eventos de hace más d

Todo en singular

“Yo no sé cuánto me quieres, Si me extrañas o me engañas, Sólo sé que vi llover, Vi gente correr, Y no estabas tú” “ Todo en singular ”, fue lo último que escuché de sus labios brotar, aún recuerdo esa mañana como si hubiese sido ayer, no hubo más ni menos palabras que me llegaran tanto al corazón, “ Todo en singular ” ¡chingao! Lo repetía una y otra vez como niño que recién aprende a hablar, ella estaba frente a mí, con sus ojos color negro como la noche, incluso te perdías tanto en ellos que podías crear un universo, fue cuando me clavó su mirada y me tomó de ambas manos para decirme; “Recuerda que lo que uno siente, muchas veces la otra persona no lo siente de la misma manera, para poder hablar en plural, las personas inmiscuidas deben de estar en el mismo cuerpo, con la misma mente y compartiendo el mismo espíritu, si no, créeme que no puedes hablar en plural, más bien lo que debes de decir sería, todo en singular” , me quedé mudo, de mi boca no brot