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¿Faltan muchos años bisiestos para que se acabe el mundo verdad?

“Pero este mundo ya giró Y ahora te tocó perder, Bebé, te lloré todo un río”   Por cuestiones del destino había llegado a un taller de vidas pasadas en Torreón, ¿Qué estaba haciendo ahí? Pues me invitaron a unos eventos cerca de ahí y agarré unos días más para poder conocer y me topé con este taller, fue algo muy extraño desde el inicio empezar con los ojos vendados y presentarnos con la persona que teníamos enfrente, me sorprendió demasiado cuando después de saludar y dar mi nombre de pronto escuché un “ No mames, es imposible que estés aquí, wey estás a más de 1000 kilómetros de donde vives, no mames no puede estar sucediendo esto ”, no atine más que decir, “ es el destino pero si quieres paramos la actividad y sigues haciendo tu berrinche, pero esta chingadera estuvo muy cara como para salirme ”, lo bueno que seguimos con el taller y acabo sin contratiempos.   Al acabar el taller pase al sanitario para hacer tiempo y evitar cruzarme con Bianca, pero creo que ella hizo exac
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¿Por qué me buscaste?

"¿Por qué me buscaste? Tiene tantos años sin vernos que en verdad se me hizo raro que me buscarás, tienes una vida al parecer perfecta lo vi en redes sociales, no entiendo ¿por qué quieres volverte a enredar con el pasado?." En ese momento le di un abrazo y me di cuenta que en verdad era ella, sentí esa calidez, sentí esa energía que me hacía saber que era ella, yo sé que nunca fuimos más que dos enamorados que jamás se decidieron a dar el siguiente paso pero creo que era bueno explicarle y fue lo que hice "sabés, me conoces bien cabron y esto no es para robarte un beso, ni encamarte ni nada de eso, es algo un poco extraño y te lo voy a tratar de explicar, un día estaba trabajando en la recolección de limón, estaba acabando la octava cubeta cuando de pronto vi borroso, pensé que era la presión o algo así, pero decidí seguír y llegar al camión pero me perdí en un momento cerré los ojos y sentí que me caí pero no toque el piso, te va a parecer extraño pero en cuanto agarr

La zona del silencio

  “…Sigues mirándome hoy, desde el infinito Vete de aquí, no tocarás mi alma nunca más…”   Bueno este viaje lo hice con mi entrañable Martha, ella era una mina muy peculiar tuvimos varios encuentros pero solo fueron fugaces y curiosamente en años bisiestos, cada año bisiesto era en diferentes meses los encuentros y esta vez ya hartos ambos de los encuentros decidimos ir a ese mítico lugar llamado “la zona del silencio” era un tour consistía en 3 días y dos noches. Desde que pasamos el anuncio de “BIENVENIDOS A CHIHUAHUA EL ESTADO GRANDE” sentimos algo que no pudimos explicar, incluso hasta la piel chinita se nos puso; llegamos al punto de encuentro que es donde íbamos a pasar las noches e íbamos a consumir las comidas, nos recibieron con comida casera y unas tortillas de harina que dicho sea de paso fue lo mejor del viaje, al instalarnos y tomar nuestra habitación esperamos un par de horas a que el grupo llegará y poder empezar nuestro viaje guiado.   Conocimos unas grutas m

¿Qué me dirías si me vieras con una máscara de luchador sobre reforma?

  “Buscaré un silencio largo, En donde el humo de un recuerdo, No sean otra cosa más que nubes bajas”     Ella se llamaba Azalea y era la contadora de esa empresa familiar, tenía ya unos 6 años trabajando ahí, empezó de practicante y fue ascendiendo hasta llegar a ser la contadora que tanto estaban esperando, ella era más bien reservada tanto con sus amistades como en su vida personal, de ella poco o nada se sabía, su cumpleaños pedía a la de recursos humanos no notificar hasta un día después, tenía una costumbre de no festejar su cumpleaños desde que entró a esa empresa, su celular no paraba de sonar por los mensajes de sus familiares y una que otra llamada de sus padres que le recordaban que era un año más grande, así que esa noche al salir de su trabajo se dirigió a ver las luchas, no era que le apasionaba es mas no le gustaba pero hacía eso en sus cumpleaños, ir a un evento que no iría en un día común, ya había ido a un partido de futbol, a un concierto de sonidero en las

Siento que volví a besarte mientras bebía

“que siempre seré el fulano de la doble vida eterna, De la eterna y dulce doble vida, Lo peor y lo mejor, Siempre viene en una botella de tequila”   Ella fue la mujer que menos me quiso y quizás fue a la que más quise, la vida me había enseñado demasiadas veces en que no debíamos de estar juntos pero yo me aferraba con uñas y dientes sin saber porque, unos decían que era por brujería, otros decían que era por beber agua de calzón directo del envase y los menos decían que era un amor de vidas pasadas, yo no me quedaba con ninguna de las versiones yo solo disfrutaba esos momentos, eso sí entre más nos conocíamos cada vez nos distanciábamos más, hasta que llegó un día que no apareció en mis mensajes, ni en mis pensamientos y mucho menos en mis sueños, pareciera como si la hubieran borrado de mi memoria, lo supe justo después de que escuché por error la misma frase que me dijo antes de partir “ya no vuelvas a buscarme”, justo me le quede viendo a esa mina a los ojos, ¿Qué buscaba? No

Secuencia de infinitos

"Yo sigo generando infinitos, es lo que hago mejor" ~ Leyva. Fue un consenso, una elección mutua atestiguante del verano que fecho nuestra primera cita cuando nos permitimos suceder la tarde en el Mugen, un café judío de la Roma, el favorito de Alexandra. Aquel día, al exterior el sol blanquecino bañaba las calles previo a su puesta, las hojas de los cipreses bailaban con el viento mientras las aves se posaban tras hallar un refugio seguro en ellos, llamando al canto, sumando al ambiente la creación de una esfera natural formada azarosamente por la concurrencia, el sin querer provocado por la propuesta de aquella musa. ¿Quieres ir? una pregunta que pretende elegir el destino, tal como lanzar una moneda al aire con la respuesta predicha, yo he aceptado al instante, aunque en el fondo me parecía una ironía nombrar en japonés un lugar de ese tipo y sabiendo que “Mugen” es también “Infinito”, pero al fin de cuentas, era solo eso, un nombre, el resto de experiencia sensorial era t