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Mostrando las entradas de mayo, 2018

#AquíEmpieza

“...Aquel día fue el más frío Del Enero más amargo Quizás el invierno más largo Que el amor ha conocido...” No sabia que carajos estaba pasando, tampoco supe de donde saqué las fuerzas pero lo hice, no quería hacerlo por mil y dos cosas pero al final lo logré hacer, solo me faltaba hacer una llamada y era la de mi mejor amigo, tomé el celular y le marqué: Yo: hermano ¿Cómo estás? Amigo: Bien, aquí ya preparandonos para ir a tu boda hermano y ¿tú qué tal? No me digas que ya te arrepentiste jajajaja Yo: Justo de eso te quería hablar, ya no me voy a casar, por favor avisale a tu señora, luego te cuento bien. Amigo: ¡No jodas Cabrón! Con eso no se juega. Yo: Es verdad, no voy a casarme, te dejo que ando en casa de mis padres y mi madre no anda muy bien que digamos, no le cayó en gracia la noticia. Si se preguntan ¿cómo me siento? Pues, si no han cancelado su boda cuatro horas antes entonces, dudó demasiado que logren entenderme, mi madre estaba devastada,

Tres o cuatro vidas

“ ...la vida es eterna en cinco minutos, los que nos tomaba quitarnos la ropa. Lo que el amor tarda en descubrir mis trucos o tu despedida borrarme la boca...” - No entiendo porque me has seguido, has visto todo, sabes de mi todo en absoluto, conoces cuantas muertes llevo en mi cuenta personal y aun así me sigues, no entiendo que buscas ni que esperas de mi, no soy ese típico chaval que se enrolla con una chica, no tengo futuro, tengo dinero pero todo es de lo que he robado, ¿que quieres de mi? - Fue lo que le dije a esa mina cuando llegué a la casa de campo en la cual me guarecía y ella estaba sentada en el sofá reclinable, con una taza de café en la mano derecha y un cigarrillo en la izquierda, ella era muy linda, cabello lacio, 1.70 cm de estatura, no muy delgada, con unas tetas pequeñas y unas nalgas respingonas, nariz afilada y una mirada que te hacia enloquecer, quizás le llevaba unos 8 años, la conocí desde que estuve en la cárcel la única vez que p

Volver por ella

“Entre el alcohol y algo más quedé moribundo Cansado ya de soñar, y hoy puedo hacer la canción más hermosa del mundo y besarte al despertar” Jodido y re jodido me subí a rápidamente a aquella  limusina naranja  que es la forma común de llamarle al Transporte Colectivo Metro, iba a una entrevista de trabajo, traía mi mítico traje gris con líneas delgadas color azul, una camisa azul claro acompañando una corbata en diferentes tonos de azul, un cinturón café y unos zapatos del mismo color, traía un maletín con un folder color azul en donde venia mi CV y al folder le hacía compañía  Tokio Blues norwegian Wood, de Haruki Murakami , estando dentro del vagón saque el libro y quite aquel billete de 50 pesos que servía como separador, empecé la lectura en esa página 216 donde él hace la promesa de volver y dentro de mi cabeza empezó a resonar  Volver, volver, volver,  de mi ojo derecho corrió una lagrima, medio cerré el libro e intente secarme la lagrima pero ya era demasiado tarde