Tienes un E-mail
“…si me pudieran dar a elegir,¿Cómo y dónde? Yo quisiera
morir,Contestaría,Acostado, feliz de estar a tu
lado,Víctima de un sexo exagerado,Sonriendo, mirando el techo,Con tu cabeza en mi pecho…”
Hola:
¿Te acuerdas como nos conocimos? Fue muy raro, nos encontramos en la vía
recreativa, nos tocó el semáforo y recuerdo que dijiste “¿te sientes bien?
¿Necesitas algo?” y yo voltee a verte, me llamó la atención tu voz y
también que preguntaras eso ya que no me conocías pero después solo te dije “me
urge una cerveza” yo andaba en patines y tú en una bicicleta tipo retro,
ibas de jeans, botas, barba como de tres días y una camisa azul manga corta, te
me hiciste muy hípster no andabas como para hacer ejercicio, después me dijiste
que fuéramos al seven que estaba ahí aun lado de nosotros, ese que está en el
cruce de federalismo y Juárez, yo estaba esperándote a fuera cuidando tu bici
cuando de pronto saliste con dos vasos de café de los grandes, recuerdo que yo
solo te vi con cara de “te mamaste pinche hípster” venían así con la manga y la
tapita, en eso me ofreciste uno y dijiste “no sabía si lo querías con azúcar
o splenda, pero le puse dos de splenda”, lo tomé solo para no hacerte
el desaire pero cuando le di el trago esperando que fuera café caliente me di
cuenta que era una cerveza helada, en ese momento no sé porque pero me caíste
bien me encantó tu idea de poner cerveza en un envase de café, después nos
sentamos en el parque rojo, platicamos de varias cosas y solo teníamos dos
cosas en común, veníamos de ciudades distintas y que compartíamos el gusto por
beber, pero éramos muy distintos, después me acompañaste a donde rentaba, ibas
con la bicicleta en las manos y caminando, no dejabas de verme y tu mirada me
ponía nerviosa.
Después nos vimos por los siguientes días, estuvo gracioso un sábado que
te dije que no creía en el amor y tu traías el libro de “20 poemas de amor y una
canción desesperada” de Neruda, lo traías para prestármelo, a pesar de que te
había dicho que estaba leyendo Harry Potter, pero bueno ese libro nunca te lo
devolví y te seré sincera después de tantos años por fin pude terminar de
leerlo, el poema 12 es mi favorito, yo creo que fue porque me lo recitaste la
primera noche que compartimos.
¿Recuerdas como iniciamos esa noche? habíamos hecho un acuerdo en
que nos comportaríamos como novios por esa noche, esa vez fuimos a caminar a
Chapultepec a los puestos que se ponen en la noche, me compraste un cuaderno
con un grabado de un corazón, una figurita de shrek de las que mueven la cabeza
que ponen en los carros y una pulsera que decía “Alejandra” mi segundo nombre
que siempre odiaba, incluso así me decías, me lo dijiste tanto que termine por
aceptarlo, pero solo fue momentáneo, ahora cuando me lo dicen te recuerdo y me
enojo poquito.
En verdad me habías enamorado, no sé si fueron los besos, las cervezas,
tu aroma a whisky con bvlgari y tabaco, tu whisky escocés o por la forma en que
me tratabas, pero nunca fuimos más que un free, un free que compartía todo, un
free que hacíamos llamadas, nos mandábamos SMS, incluso fuiste conmigo a un par
de misas, recuerdo la primera vez que me acompañaste a una misa traías una cara
de que estabas desvelado e incluso aunque se veía que te habías bañado pero
olías a alcohol y también traías un par de vasos de café de esos del Oxxo, yo
te iba a regañar pero me dijiste “no me juzgues, mi cabeza sigue dando
vueltas pero te había prometido venir”, agarre el vaso y le di un trago
pensando que era cerveza y me quemé la boca por tu culpa, tu empezaste a reírte
pero no con tu risa burlona si no solo temblabas y enseñabas los dientes como
si estuvieras sonriendo, después me diste un beso y me dijiste “nunca
confíes en mi” mientras seguías burlándote, era imposible que no
confiara en ti, siempre fuiste muy claro, incluso recuerdo como hablabas de tus
ex sin pena cuando te preguntaba sobre alguna foto que veía en tu tablet,
recuerdo como me dabas un beso en la frente al despedirte y me decías que me
cuidara, recuerdo tus abrazos al saludar y al despedirte, recuerdo que aunque
no me lo pediste yo me sentía como si fuera tu novia.
Pero también recuerdo momentos malos, por ejemplo cuando ya no nos
vendían cerveza en el seven por la hora y solo le decías a la cajera “Marce,
no seas malita, es más te picho dos latas para ti, anda se bonita” en eso
le dejabas el dinero en el mostrador y nos salíamos, después ella salía por la
puerta de atrás y nos daba las cervezas en una bolsa negra, creo que siempre le
tuve celos a esa cajera, pienso que tuvieron algo que ver. También no voy a
olvidar una noche en especial, venías con un zapato café y uno negro, con un
pantalón de vestir negro y una camisa blanca, sin corbata ni saco, nos habíamos
quedado de ver en “el santitos” para tomar una cerveza y llegabas tarde como
era tu costumbre, venías extraño, te pregunte por tu día y solo dijiste “de
la chingada, pero me tocó entrevistar a una morra y me llamó la atención” después
me contaste tu día, esa odisea que sigo sin creerte que sucedió, bueno en
verdad me centré en lo que habías dicho de la morra que te había llamado la
atención, sentí celos pero no te dije nada.
¿Te acuerdas la última vez que hablamos? Fue tiempo después estaba yo
formada para comprar boletos para el partido de Leones contra Necaxa y de
pronto apareciste, desde lejos te vi y yo creo te llamé con la mirada porque
fuiste a donde yo estaba, estúpidamente me preguntaste que hacía ahí y te dije
que estaba formada para servir comida para un asilo y fue cuando te diste
cuenta de lo estúpido que te viste al preguntarme eso, me dijiste que si podía
sacarte unos boletos, te quería decir que no pero solo te dije “¿Vas a ir
con aquella morra por la que me cambiaste?” para hacerte sentir
culpable y te fueras pero en eso recuerdo que tu sonrisa se apagó, te pusiste
serio y solo dijiste “no, ella ya no quiere saber de mí desde que me fui de
acá, solo vine al partido voy a ir con unos amigos”, de inmediato te dije
que iba a ir con mi novio para ver si sentías celos, lo hice para defenderme
para que no dijeras nada pero tu dijiste “oye que chido, pues sirve que nos
echamos unas chelas y le digo dos tres truquitos” y me viste con esa mirada
tumba calzones que tienes mientras sonreías, yo no podía creer que fueras tan
sinvergüenza pero me hiciste reír nerviosamente, al final te dije que si te
compraba los boletos y te quedaste ahí conmigo, platicamos de cualquier cosa
incluso hasta pagaste mis boletos, pero después ya no fui al estadio, fue mi
novio y su hermano, sabes al final si se conocieron lo sé porque me enseño un
video donde estaba feliz de encontrar a uno que le fuera al Necaxa también y
estaban los dos ya un poco borrachos gritando improperios a los jugadores, pero
estoy segura que no le dijiste ningún truquito de los que dijiste que le ibas a
decir.
En si el correo fue porque te vi hace poquito mas de un mes en un bar,
estabas con una morra muy bonita, estoy segura que eras tú porque la voz era la
misma solo que traías unos lentes muy chistosos y no te veías como hípster
ahora parecías como presidente de un municipio pequeño pero te veías feliz con
ella, después estuve leyendo tus escritos y me di cuenta que solo me
contemplaste en dos, contaste nuestra historia pero a tu modo, me sorprendió
que escribías que tu tuviste la culpa, es muy raro ver que te expresas diciendo
que has tenido errores pero quizás es por tu personaje y no eres tú en verdad.
Y volviendo a los malos recuerdos, recuerdo que no paso más de un mes después
de que entrevistaste a esa morra que te llamó la atención cuando nos dejamos de
ver, te veías muy ilusionado y aunque no lo creas yo te desee la mejor de las
suertes con ella, pero después leyendo tus escritos me di cuenta que no fue
así, supongo que es de la que tanto escribes.
Para acabar tengo tres cosas que decirte, la primera es Gracias por
haberme enamorado cuando yo no lo pensaba, la segunda espero que estés bien,
que sigas aplicando el famoso carpe diem con el que cerrabas todas las pláticas
y el tercero que no me olvides yo todavía sigo rezando por ti.
Con Cariño Alejandra, la regia.
Es el final??
ResponderBorrarMe gustó como lo relatas, y al final la vida sigue?, cada uno continuo con su vida....
Saludos
Es el final de una serie de 7 recuerdos, la vida sigue y todos los inmiscuidos siguen con su vida y espero sigan muy bien.
BorrarTe mando un abrazo en forma de agradecimiento
Perdón fueron 8, el bonus también cuenta...
BorrarEs extraño, ¿verdad? personas que se fueron hace siglos cambiaron nuestras vidas y casi nunca se quedaron para ver el resultado. Supongo que toca dar las gracias por lo momentos, en el fondo mereció la pena, ¿verdad?
ResponderBorrarLa vida es extraña, quizás al final encontremos el sentido de todo lo que nos pasó, quizás no, quizás solo eran fallas en el trayecto, pero si valió la pena y mucho.
Borrarlo hemos comentado muchas veces, sí, al final lo importante no es dónde te lleva el camino, lo que importa es el camino en sí.
Borrar